BOBTAIL
RAZA DE HIDRATACIÓN LIGERA
TEXTO EN REVISIÓN
DENTRO DE UNOS DÍAS USTED DISPONDRÁ DE UN TEXTO MÁS PORMENORIZADO QUE RECOGERÁ NUESTRAS ÚLTIMAS EXPERIENCIAS.
A los profesionales del Bobtail les obsesiona la calidad del manto. Es una raza con mucho pelo, que requiere un cuidado especial. Se ha de cepillar con mucha frecuencia con el fin de evitar que el pelo se anude. Por eso son muy importantes los cepillos que se elijan.
Es frecuente ver en mi stand en la Exposición de Madrid, el día que participan los Bobtail, a los criadores más afamados discutiendo sobre cepillos. Es interesante ver hasta qué punto se afina en una cuestión que en otras razas resulta irrelevante.
Te recomiendo más abajo los cepillos preferidos por los que más saben.
Otra cuestión de primer orden consiste en evitar que el pelo blanco de las patas y barbas amarillee. Estas zonas necesitan ser lavadas con bastante frecuencia.
Báñale las barbas y patas siempre que estén sucias, con un buen champú de pH similar al pH de su piel. Utiliza el Champú Kw. Realzador de Tonos claros.
No temas al agua y al buen champú. ¡Sé lo que digo!. Puedes lavar el perro entero cada treinta días y aplicar tras el aclarado el acondicionador Kw. o su agente hidratante habitual Kw. Mantendrás el manto en mejores condiciones y evitarás que el cepillo o la carda rompan el pelo.
También la piel y el manto del Bobtail necesitan que se les aporten hidratantes externos fuera del baño, en seco. De lo contrario el pelo se vuelve más quebradizo, se enreda y se parte. Con el tiempo, puede llegar a presentar trastornos en la piel.
El tacto de tus dedos te dirá con qué frecuencia debes hidratarlo. No abuses de los hidratantes porque has de tener en cuenta que el manto ha de ser ligeramente áspero. Además, si abusas de los productos hidratantes, hasta que sean absorbidos, el pelo quedará muy pesado. Y así te resultará imposible cardarlo en el arreglo para la exposición.
Si tiene el pelo próximo a los lacrimales decolorado disimúlalo con un lápiz lacrimal. Y utiliza el antilagrimeo como prevención.
No olvides limpiar los oídos en cada baño. Utiliza un buen limpiador de oídos. Evitarás visitas al veterinario. También aprovecha que en el baño las uñas se han ablandado, para cortarlas.